El Faraón no quiere Internet
Zapatero pacta con la mafia sindical subir la jubilación solamente hasta los 67 años.
Dos años más que ahora. La gente todavía no se la acaba de creer.
Un nuevo pacto de la cloncloa.
José Luís les desea el mismo paraíso que hemos logrado los españoles a los de la costa sur del mediterráneo.
En la cámara de Trafalgar Asqueare de la policía se ven miles de estudiantes británicos. No quieren pagar a las universidades y el transporte.
(A propósito del transporte el gobierno de SP, sube el transporte a la pasada del verano y entre las noticias de los culos operados de Resaca o la playa larga de La Serena)
Un Domingo como este mataron a Mahatma Gañid.
Y como homenajeando al maestro se plantaron miles en las calles para acabar con la corrupción.
Estamos hasta el culo de los corruptos. India libre de corrupción.
Los jakers egipcios igual leen el inmenso movimiento social que se está produciendo en estos mismos momentos.
A diferencia del terremoto del año pasado, que todavía llevamos en las manos temblorosas, esta marejada mediterránea e índica y británica.
La tecnología que los mismos países compraron al llamado primer mundo ahora les sirve al personal díapie y bus y metro.
A propósito ya corren ventiscas por face sobre el no a las alzas solapadas del maldito transantiago.
Los nuevos faraones de la moneda parece que todo les tuviera que dar números azules.
No toman locomoción colectiva. Andan en helicópteros.Cifras para esto y para lo otro.
Pero bueno, no puedo interrumpir la crónica con la ropa sucia casera.
Que si sucede es porque es la misma en el Cairo y Mapocho Citi.
Que los restos del Cartago romano en Túnez, de la noche a la mañana vio despegar un avión con rumbo a Arabia Saudita.
Dobló lueguito hacia el sur tunecino y pasó por el aire justo en el momento en que estaban filmando la guerra de las galaxias 33 y desde el aire se acordó que había dejado la maleta con los euros en el velador.
Los tanques con sus jóvenes soldados compartiendo. Es al parecer la policía la que carga y dispara contra los manifestantes.
Hay debate en el ejército mientras ganan tiempo hablando por la tele, parando para comer y beber alguna cosita para los cuerpos que se van deteriorando implacablemente.
El director de la prisión estaba mirando una película de un tal Godard. Por el mediterráneo un grupo de turistas recorre lugares exóticos del viejo mar.
Por supuesto todo lo sur ya entra en la palabra exótico.
Pero a la vez ya están todos conectados.
En uno de los aeropuertos de Londres aterriza el avión llegado desde el Cairo. Buena parte de la familia Mubarak y algunos amiguis.
A casi nadie se le olvido las tarjetas doradas rebosantes de dólares. Quizás algunos de los billetes de los mil quinientos millones de dólares que Barack deposita a Mubarak.
O depositaba.O vaya a saber uno si en el orgasmo de la especulación financiera que sucedió ahora la cifra ocho.
SY les tiene listos los alojamientos y toman nota como tomaron nota cuando los ingleses tomaron otros aviones o quizás se vinieran en el submarino electrónico que a veces enloquece al mediterráneo.
“Mubarak,Mubarak el avión te espera”
Uno de los gritos de los manifestantes de la Plaza de el cairo. Casi al mismo tiempo dos aviones cazas pasan a baja altura y las gentes sienten el estremecimiento pero transforman el miedo en creatividad.
Israel apoya decididamente a Mubarak.Dice uno de los morenos de bigotes y la cámara de un turista catalán sirve para transmitir por el libro de los rostros.
Vuelve a Túnez de un exilio de veinte años y pide no aflojar,transformar la energía en una democracia.
El hombre suelta unas lágrimas cuando ve la laguna que acompaña a la capital Tunecina hoy transformada en el inicio de una revuelta ciudadana sin precedentes.
Cerca de cinco mil personas le reciben en algo que para muchos es la primera vez que pisan el aeropuerto.Están emocionados.Asombrados.Se siente involucrados.
El que vuelve ha cambiado.Una cosa es vivir en Túnez y otra vivir en Inglaterra.
London Citi es uno de las ciudades mounstros que han atrapado a buena parte de la población mundial.
El exiliado teme que la comida de camaradería que le ofrecerán en la Kasba tenga conejo.Es época de conejos piensa.
Le comenta a un asesor y este transmite a los camaradas que al maestro le encanta el conejo de su patria.
Que su paladar aullaba de nostalgia por ese sabor.
Mientras por el canal cerrado de Alyasira preparan notas que salen al aire por pequeñas estaciones.
El editor fuma y deja un momento la nota sobre Túnez y coloca al aire una cena entre civiles y militares en una esquina de la Plaza de la Liberación.
Comparten y uno le dice a un joven uniformado.
-Deben elegir tus generales entre el dictador mubarak y el pueblo egipcio. Un buen café con unos panes dulces. Cigarrillos americanos.
Algunos ven un video de Shakira.Otros sentados meditan.Se dice que están torturando a varios de los detenidos.
No se la pueden creer que todo esto fuera un efecto de contagio viral por lo sucedido en Túnez o cuando vieron desde el bar las protestas del pueblo griego.
Ni el toque de queda.Ni los cazas a vuelo rasante y dejando una estela de dos líneas paralelas de humo.
Y de los tanques ni hablar uno les sirve de parada antes de empezar nuevamente con los gritos.
En el Hotel Americano ven una peli de AH.
El hombre equivocado. Una joya y bueno recuerdan cuando el abogado defensor les dice que averigüen bien lo del boxeador que estaba ese día en la partida.
Bueno y lo que parece que va a terminar mal finalmente cambia y Rose,la mujer del hombre equivocado,sale del manicomio y aparece el The End.
El el bar Casablanca de El Cairo,la mitad aplaude.
-Mañana Huelga General, dice uno de los camareros. El próximo café a cuenta de Alá.
